Guanyar Alcoi ha denunciado el que califica de “caos generalizado” en la gestión municipal de obras y contratos de servicios. Según la plataforma, el gobierno local acumula un historial preocupante de retrasos, prórrogas y carencia de planificación que afecta directamente la calidad de vida de la ciudadanía.

Desde la plataforma ciudadana recuerdan que proyectas como la reforma del Instituto Andreu Sempere —que hace años tenían que haberse llevado a cabo—, coincidirá ahora con el inicio de las obras del futuro Pabellón de Gimnasia Artística al patio de la Escuela Oficial de Idiomas —causante molestias al alumnado de Andreu Sempere que se ubica allí provisionalmente y al de la Escuela Oficial de Idiomas—, la Rosaleda, el barrio de la Font Dulce y el Sagrado corazón, Rodes o el puente de Serelles acumulan años de retraso, licitaciones falladas u obras eternizadas.

“La situación ha llegado a un punto insostenible”, ha remarcado el portavoz de la plataforma ciudadana, Sergi Rodríguez. “Cuando no es por unos precios calculados a la baja en las licitaciones, es por unos plazos irrealizables que dejan concursos desiertos o por unas obras que acaban demorándose años. Esta manera de funcionar, lejos de ser un caso aislado, se ha convertido en la norma en Alcoy.”

Además, Guanyar denuncia que los grandes contratos de servicios privatizados —como el transporte público, la gestión del agua, el tratamiento de residuos (RSU) o la limpieza viaria— continúan encallados, a pesar de haber superado con creces los periodos de adjudicación y prórrogas —entre los 20 y 25 años o más—. “No se trata de falta de tiempo para planificar; se trata de carencia de voluntad política y de gestión eficiente.”, ha añadido Rodríguez.

La plataforma ciudadana también alerta de la saturación que sufre el personal público, que tiene que hacer frente a una acumulación constante de imprevistos provocados por la mala planificación política. Esta situación, añaden, genera más presión sobre la gestión municipal y agravia todavía más la problemática.

Guanyar Alcoi considera que la ciudad no puede resignarse a esta dinámica y reclama cambios profundos en la gobernanza. “Alcoy podría ser una ciudad mejor gestionada y planificada, pero a estas alturas no lo es. Las excusas ya no son válidas: hace falta otra manera de gobernar, más ágil, eficaz y comprometida con el bien común. Desde la oposición de izquierdas tenemos la obligación de denunciar estas carencias, así como la obligación de demostrar que otra manera de gestionar, más eficiente, es posible. Hasta ahora el equipo del gobierno actual, así como los anteriores del PSOE y, mucho menos, los del PP, han hecho los cambios necesarios para poner en Alcoy donde la ciudadanía merece.”, ha concluido Rodríguez.